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AÑO 12 - EDICIÓN Nº 2353
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SOCIEDAD
jueves 4 de junio de 2015

No habrá más aplazos en escuelas primarias


Fue por decisión de la Dirección General de Cultura y Educación. Alumnos de primer ciclo sólo podrán recibir como nota más baja un “regular” y los de segundo, un cuatro. Advierten que dicha calificación es “estigmatizante” para los menores. Además, el boletín de calificaciones será reemplazado por la “Libreta de Trayectoria”.

docentes

El 2015 cuenta con novedades para los docentes de la Provincia en materia de calificaciones. Ya no podrán evaluar al alumnado con valores menores al cuatro. El nuevo Régimen Académico del Nivel Primario se aplicará a los casi 3,1 millones de niños que asisten a instituciones públicas y privadas en el territorio bonaerense.

A partir de un comunicado de la Dirección General de Escuelas, en el primer ciclo la calificación será conceptual estableciéndose la siguiente escala: regular, bueno y muy bueno. En el segundo, será del 4 al 10. Del 4 al 6 significa desaprobación; y del 7 al 10 aprobación.

Desde el área indicaron que "lo que se busca es incluir en el sistema, no una flexibilización de las exigencias, sino un cambio de los métodos de evaluación".

La normativa establece, por otro lado, que los estudiantes aunque adeuden dos materias podrán avanzar al siguiente grado. Tendrán tiempo hasta diciembre para recuperar los contenidos y si no lo consiguen, repetirán. Tampoco serán obligatorias las pruebas “compensatorias” de diciembre o marzo.

En el caso de los más pequeños, ya no repetirán primer grado. “Al finalizar el primer año no se consignará promoción, debido a que compone una unidad pedagógica con el segundo año. Constituyen instancias cronológicamente consecutivas y graduadas, que conforman una unidad de seis trimestres”, establece el nuevo sistema.

Por último, la designación de los abanderados también fue modificada. Ahora, los colegios pueden decidir que la bandera la lleve el mejor compañero o un alumno elegido por una razón diferente a lo exclusivamente académico. Por ejemplo, aquellos que se destacaron en alguna actividad científica, artística o deportiva. O quienes lograron superar dificultades de orden pedagógico o vincular.

 

Posturas disidentes 

Las opiniones disconformes de los sindicatos no se hicieron esperar. “Este nuevo mecanismo desalienta el esfuerzo de los chicos”, es uno de los argumentos que plantean quieres creen que con estos cambios se “nivela para abajo”. Otros, avalan las medidas, pero consideran que existen otras prioridades para resolver en torno a la educación.

Desde la seccional local de la Unión Docente de la Provincia de Buenos Aires (UDOCBA), explicaron en diálogo con www.deBrown.com.ar que rechazan la eliminación de los aplazos por considerarla una “modificación inconsulta”.

“Antes de tomar esta decisión, se debe discutir con profundidad qué tipo de educación queremos y para qué proyecto de país. Este debate aún está adeudado y es fundamental para nuestra sociedad”, advirtieron.

El gobierno y sus funcionarios, modifican alocadamente las normativas, ni siquiera reparando en la opinión de la sociedad donde el 92 % rechaza esta modificación”, sumaron.

Silvia Savarese, secretaria general de la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB) Brown, en declaraciones a este medio planteó que debe haber distintos niveles para calificar. “Primero tenemos que ver qué tipo de escuela queremos, si una regulada, una diferente o no graduada. Las prácticas docentes constantemente hay que reverlas, pero deben ser los educadores los que lo hagan. Estamos nivelando para abajo desde hace tiempo”, opinó.

Además, recordó que entre las cuestiones a resolver se encuentran las dificultades edilicias de los establecimientos educativos, la cantidad de días que se pierden por los paros de auxiliares agremiados en la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), comedores escolares y otras problemáticas diarias.

Mientras que, desde Suteba, su titular, Roberto Baradel defendió esta modalidad e indicó: “Vemos positivo que den mayores herramientas a los chicos para que puedan aprender más. No se trata de eliminar los aplazos, sino de usar otra herramienta pedagógica. El aprobado o desaprobado queda vigente. No el tema de la evaluación”.

 

 

 

 

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